La gran invocación

Desde el punto de luz en la mente de Dios
fluye luz a las mentes de los hombres,
la luz descendió a la Tierra.
Desde el punto de amor en el corazón de Dios,
fluye amor a los corazones de los hombres,
Cristo retornó a la Tierra.
Desde el centro donde la voluntad de Dios es conocida,
el propósito guía a las pequeñas voluntades de los hombres,
el propósito que los maestros conocen y sirven.
Desde el centro que llamamos la raza de los hombres,
se realiza el plan de luz y amor
y se sella la puerta donde se halla el mal.
La luz, el amor y el poder
restablecen el plan en la Tierra.

Que así sea y así es.
Aquí y ahora.